En la economía post pandemia Covid19, el sector turístico está agilizando cada vez más su transformación digital para poder superar los retos que se presentan de cara al futuro a corto plazo. Por ello, esta semana se ha celebrado en el Recinto Modernista de Sant Pau, en Barcelona, una nueva edición del congreso Forum TurisTIC.
En este simposio ha quedado patente que la digitalización del turismo ya está siendo una de las claves para la reactivación del sector junto con las nuevas tecnologías. La combinación de ambas están aportando soluciones reales para ofrecer experiencias más seguras e innovadoras, a la vez que se aprovechan las herramientas para captar más información de los cambios de comportamiento de los viajeros y ayudar a comprender la demanda en estos tiempos diferentes.
Durante el congreso también se ha debatido mucho sobre la gestión del retorno, la captación de turistas, el control de flujos y la experiencia del usuario. El sector turístico debe convertirse en un catalizador de renovación por su capacidad propia de innovar en otros sectores que pertenecen a su cadena de valor.
El sector turístico será digital o no será
En el congreso se han analizado los acontecimientos del año pasado en que el sector tuvo que paralizarse por completo y cómo algunas iniciativas rompedoras ya se están poniendo sobre la mesa. Como por ejemplo, nuevos modelos de negocio como cooperativas de viajes sostenibles, gestión de destinos mediante Inteligencia Artificial, los fondos europeos Next Generation EU y nuevos proyectos establecidos para adaptarse a la nueva normalidad.
Los expertos coinciden en que el cambio estratégico del sector ya se está produciendo por el uso de las nuevas tecnologías como el Big Data, la Inteligencia Artificial, la robótica y el Blockchain para mejorar la experiencia del viajero y promover un turismo más sostenible y rentable.
La automatización puede solucionar problemas relacionados con cierta escasez de profesionales en algunos campos y competencias específicas. Los sistemas de Inteligencia Artificial pueden contribuir a mejorar las habilidades de los empleados ya que éstos pueden delegar tareas rutinarias en máquinas, mientras pueden centrarse en la interacción con los viajeros.
En la actualidad los viajeros se encuentran mucho más digitalizados y usan las tecnologías en todos los procesos de su experiencia turística. Ya están habituados a los check in online, chatbots, experiencias inmersivas, contratación online y realidad virtual. Quizá solamente quede pendiente la creación de un nuevo ecosistema de startups que trabajen para crear un sector turístico más competitivo y sostenible económica, social y ambientalmente.
Sostenibilidad como solución de presente
No solamente la digitalización tiene un gran peso en la transformación del sector, sino que la adaptación a los cambios de la demanda hará que estos cambios sean duraderos.
Ahora más que nunca el objetivo principal se centra en la satisfacción del turista creando experiencias innovadoras y sostenibles para dar soluciones a las nuevas demandas de ganas de diversión, de desconectar de la ciudad, de tener experiencias gratificantes y a la vez enriquecedoras, todo esto está abriendo nuevas oportunidades de oferta turística.
El sector está apostando por un crecimiento sostenible y diversificando sus propuestas, como se está demostrando recientemente la apuesta por los viajes, destinos e instalaciones sostenibles. Existe una voluntad de establecer una nueva economía de viajes basada en una visión diferente de crear puestos de trabajo locales, artesanales, inmersión cultural y mínimo impacto ecológico.
Nos encontramos a las puertas de un cambio de peso donde ya no solo se quiere mejorar la experiencia del turista, sino que se trata de una transformación del sistema turístico con nuevos proyectos y nuevos perfiles profesionales.
Durante el congreso se presentó el proyecto europeo CHARM, con el cual se pretende derivar el flujo de turistas hacia zonas rurales mediante un producto turístico innovador, responsable y sostenible. Se ha estado debatiendo sobre cómo las tecnologías pueden ayudar a los pueblos a desarrollar proyectos de turismo sostenible para atraer más viajeros e influir directamente en la economía local.
La clave se encuentra en desarrollar un plan coherente y estratégico de márketing para avanzar en dinámicas económicas, ambientales y sociales enfocada en el bienestar de los ciudadanos.
Nuevo nicho de mercado
Dentro de toda esta transición, la pandemia ha acelerado el crecimiento de un nuevo perfil de viajero, el de los “nómadas digitales”. Un nuevo nicho de mercado turístico impulsado por el teletrabajo y la descentralización de grandes y pequeñas empresas. Las preferencias de destino suelen ser las zonas céntricas de ciudades turísticas o bien pequeños núcleos rurales según las necesidades de cada persona, pero sobre todo reclaman flexibilidad.